Carlos García-Galán es uno de los responsables del Proyecto Orion, que llevará el hombre a Marte en 2030. De pequeño quería ser astronauta y sólo su madre le tomaba en serio. A los 22 años entró en la agencia espacial de EEUU y hoy trabaja en algo que ni llegó a soñar: construir una nave espacial.
Cuando un camión pasa junto a un edificio, las vibraciones pueden viajar hasta la estructura de la azotea y bajar de nuevo, generando fugazmente temblores minúsculos a través de las vigas y otros componentes de la estructura.
Un proyecto de la Real Academia de Ingeniería persigue fomentar estas vocaciones entre las jóvenes estudiantes desde pequeñas y acercarlas a las carreras técnicas y científicas.